Tiempos de treguas.
Las derrotas más dolorosas son las que claramente se pudieron evitar. Tal es el caso de la ocurrida el pasado domingo en EDOMEX, por Alejandra del Moral. Perder por 8.3% dando tantas concesiones; divididos entre los priistas, divididos entre los panistas; dándole curso a las viejas rencillas entre priistas y panistas; con intelectuales que supuestamente apoyan, pero que no pierden oportunidad para refrendar su antipriismo ante sus fieles.
Sin desestimar muchas apreciaciones que han trascendido sobre el desenlace en EDOMEX, un dato interesante es que las campañas se movieron con la guía de las encuestas y del feeling, por no decir que a lo pendejo. Un juego de fantasías y propaganda. Dicho en otros términos, no se tuvo la precisión de los Monitoreos Estadísticos para detectar con oportunidad riesgos y oportunidades, que tan los hubo, que se redujo a 8.3% lo que se avizoraba como una ventaja de 24%. Dicho de otro modo, una campaña de Alejandra más basada en la ciencia, le pudo dar el triunfo.
Valga lo anterior solo para sustentar una afirmación: ¡No es descabellado que la alianza PRI-PAN-PRD gane la elección presidencial del próximo año!
Por supuesto que hay muchas trayectorias de triunfo y de derrotas tanto para Morena y aliados como para la oposición tripartita, que se irán definiendo según se vayan resolviendo los grandes retos que habrán de enfrentar para definir los candidatos respectivos, pero pensando en la oposición, un reto crucial será superar sus conflictos; que entiendan que insistir en ellos es dar una ventaja importante a Morena. No se puede esperar que mejoren sus opiniones respecto de ellos mismos, son muchos los agravios y más que justificados están para el conflicto; pero sí deberían entender que son tiempos de treguas, y que lo más práctico es nuclearse en torno a las dirigencias partidistas vigentes. Una vez pasada la elección, si la víscera así lo indica, ¡mátense cabrones!, pero sí en verdad quieren competir con posibilidades de éxito contra Morena y AMLO, el imperativo es la tregua.
Morena es un Tigre de papel, es un gigante con pies de barro, que genera la ilusión de una gran fortaleza por el apoyo de tres sectores vulnerables que en mucho dependen del dinero que reciben y le agradecen a AMLO: los mayores de 68 años, quienes tienen menos de 6 años de estudios e ingresos entre 2400 y 5000 pesos mensuales. Inflan los valores de encuesta pero no las urnas.
De modo que por ahí va la cosa compañeros. Nos encaminamos a la fascinante elección presidencial del 24; cada opción tiene sus ventajas y desventajas. De la inteligencia con que muevan sus fichas, dependerá el resultado.
Dispongámonos, desde el palco de la marginación informada, a disfrutar del espectáculo cómico-trágico de la lucha por el poder.
Libertad, igualdad, fraternidad y racionalidad.
