VALORACIÓN SUSCRIPTORES NACIONAL 29 DE SEPTIEMBRE
- Independientemente del período sin mediciones, todo indica que la situación general de la opinión pública permanece prácticamente en el punto en el que quedó a finales del mes de agosto, y eso es el rasgo más destacado de este monitoreo.
- Al contrario de lo que augures y opiniones teóricamente autorizadas, respaldadas por encuestas también supuestamente rigurosas, la realidad es que AMLO permanece con extrema solidez en los valores previos.
- Esos valores, en torno al 60 por ciento de aprobación, se mantienen inamovibles desde antes del inicio del verano, cuando Andrés Manuel tuvo los últimos indicios de desgaste. De ahí en adelante, ese promedio ha sido invariable, y de hecho a menudo el dato del monitoreo replica prácticamente el de la encuesta, como en esta ocasión.
- Nada cambia tampoco en desaprobación, de donde cabe interpretar que los plantones, la actualidad y aparente pujanza del movimiento FRENAAA, o la golpiza mediática que propina al Presidente gran parte de la intelectualidad, le está produciendo a Andrés Manuel ni un rasguño.
- Me muestro plenamente de acuerdo con el Dr. Borrego particularmente en dos puntos de sus conclusiones generales sobre esta medición: los medios de comunicación carecen de la influencia que en otros tiempos no lejanos gozaron, y gran parte de quienes ahora se quejan amargamente deberían hacer un ejercicio de reflexión y autocrítica en cuanto a su responsabilidad en la llegada de AMLO al poder. Y también en la forma en que lo ejerce y en la propia manera de ser y actuar de López Obrador.
- Hay más signos que indican un refuerzo de su figura. Por ejemplo, el “Top of mind” de preferencias para la Presidencia, donde Andrés Manuel evoluciona por cuarto punto consecutivo por encima de su media. Al mismo tiempo, Ebrard completa una serie por debajo de su promedio favorecida, como indica el hipocentro, por los sectores donde AMLO es más fuerte, que no son otros, como sabemos, que la antigua base del PRI.
- En cuanto a los partidos, y en concreto a Morena, la formación política fundada por el de Tabasco también se mantiene extraordinariamente sólida en sus números. El núcleo duro de los que se sienten identificados con ese partido sigue muy estable alrededor del 20 por ciento. La intención de voto para Morena en las próximas elecciones a Diputados Federales es prácticamente la misma que su porcentaje de identificación, con amplia ventaja sobre sus rivales.
- Es cierto que la suma de los partidos opositores reduciría esa ventaja, pero como se advierte en la pregunta de la disposición a votar a una posible coalición, la existencia de esta no mejoraría, en principio, el porcentaje sumatorio del 15 por ciento. Dicho de otro modo, la coalición no aumentaría la potencia de la mera suma de sus integrantes.
- Esto último, sin contar con la movilización que a buen seguro se produciría también al otro lado. Tal como están ahora las cosas, es claro que la única opción de enfrentar a AMLO es mediante alguna coalición de ese tipo, pero también lo es que queda mucho camino por recorrer en su articulación y tal vez en su modo de proceder.
- Todo el ruido mediático de los últimos meses no ha tenido efecto alguno ni en el pensamiento de los ciudadanos ni en su percepción sobre los problemas. Estos últimos siguen siendo inseguridad, Covid19 y economía, con la corrupción en segundo plano. Y la atención se centró en la pandemia y las recientes marchas feministas.
- Todo se alborota para que nada cambie, en una especie de gatopardismo social. Basta hacerse la siguiente pregunta: ¿recuerda alguien a Lozoya y a los bochornosos videos de hace apenas mes y medio? Todos responderemos que sí, pero el “Top of mind” evidencia que los ciudadanos ni lo mencionan. Los trucos de la inagotable chistera de AMLO, rifa incluida, están funcionando a la perfección.