¡Ya la perdimos! (a La Muchacha).
Finalmente, anoche medimos, anoche le tomamos su parecer a La Muchacha respecto del comportamiento o desempeño de AMLO. En medio de dos grandes escándalos, las muy desafortunadas declaraciones de AMLO sobre las clases medias y el reportaje del New York Times sobre el derrumbe del Metro en la Línea 12.
El dato de la lógica (de mi lógica) era al menos de Advertencias Negativas, con muchas probabilidades de Alertas, pero el dato que finalmente encontramos, es que a La Muchacha esas cosas le valen madre. Al menos le valen madre respecto de su opinión o quereres con AMLO.
Pues resulta que anoche el presidente registró una aprobación de 62% y una calificación promedio de 7.2, ambos indicadores en plena estabilidad; dicho de otro modo, a La Muchacha valole madre todo; para ella ¡AMLO nació perdonado! En consecuencia, quedamos frente a un reto que rebasa mi condición profesional: encontrarle lógica al dato.
¿Qué tiene La Muchacha en la cabeza (ya sé lo que algunos están pensando), que la induce a estos extremos de tolerancia, por no decir que de indulgencia?
Ojalá algún psicólogo social nos ofrezca una buena explicación, pero por lo pronto valdría la pena considerar las siguientes ideas hipotéticas:
- La Muchacha está perdidamente enamorada de AMLO.
- La Muchacha es una convenenciera corrompida (51.5% está recibiendo dinero directo de AMLO).
- La Muchacha tiene miedo, y se siente amedrentada al ver los desfiguros que hace AMLO porque no ganó absolutamente todo.
¡Sabrá Dios! ¡Uno no sabe nunca nada!, pero lo que queda claro es que los opositores de AMLO no influyen, no ganan adeptos, solo hacen encabronar más a quienes los siguen, pero no aprovechan todas las ventajas que el propio AMLO les da para fortalecerse. En suma, todo indica que están bien pendejos.
¡Como diría Nicola di Bari, Meraviglioso!
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