Atrapado sin salida (aparente).
Mi chamba ingrata es advertir riesgos, con el apoyo de los Monitoreos de Calidad industriales, que modifiqué en criterios y filosofía, para hacerlos aplicables al bajo mundo de la política. Modificar los monitoreos o diagramas de control, para ajustar sus criterios buscando la máxima rentabilidad, fue la materia para mi tesis doctoral como estadístico, en el lejano 1984.
Cuando le advierto riesgos a un cliente por lo común se altera, pero es justo cuando tiene la mayor oportunidad de fortalecerse; una paradoja muy difícil de entender para los pendejos que ven en las encuestas una forma de propaganda.
Pues bien, esta vez me toca señalar el riesgo de que AMLO se vaya de picada, porque ya se advierten claros signos de que ello pudiera ocurrir. Veamos:
1. La aprobación a la gestión de AMLO registró anoche 62.4%, cuando hace tres semanas obtuvo el valor récord de 81.6%. Esto significa una caída de casi 20 puntos, y la cuarta medición con valores descendentes; uno más y se conformará la tendencia a la baja, siendo este deterioro el más fuerte desde la crisis de marzo de 2019, por las protestas femeniles de mujer.
2. La desaprobación registra 25.5%, y es la primera vez que de manera consecutiva se registran dos Advertencias Negativas. El Hipocentro confirma que son los de mayor escolaridad y los más solventes, los que más lo desaprueban; o sea, los que más capacidad tienen para chingárselo.
3. Morena, en intención de voto para la presidencia, registra 28.4%, cuando hace tres semanas obtuvo un valor récord de 46%. Lo grave para la 4T, es que el Anti-hipocentro indica que son los de menos escolaridad y los jubilados su mayor fuerza, porque estos sectores son los que más se abstienen de votar. Dice Héctor Aguilar Camín que él cree que Morena perderá la presidencia el 24. Bajo el supuesto de que AMLO siga haciendo y diciendo tantas pendejadas, yo le diría a Aguilar Camín: ¡Estás en lo cierto, Chaparrón!
4. Para colmo de males para AMLO, los beneficiarios de estos deterioros son el PAN, que registra la primera advertencia positiva en Identificación Partidista y, como diría el Chumelín, el “dulce príncipe”, EPN, que desciende bruscamente en el indicador de Peor Político. Seguramente la Muchacha está haciendo el contraste entre la gallardía y elegancia con la cual EPN ofreció disculpas por la Casa Blanca, y los desfiguros que AMLO no ha dejado de hacer por casi un mes, en el escandaloso caso de la Casa Gris.
5. Y finalmente, para acabarla de rechingar, a la Muchacha se le borró la sonrisa de sus labios; en el indicador de Felicidad, el más resistente de todos, vamos en picada, al tiempo que AMLO afirma que somos muy felices. Una felicidad de pareja muy parecida a la que afirman los maridos golpeadores, que incorrectamente son llamados machos, cuando son unos pinches maricones.
Así las cosas, compañeros, AMLO no tiene salida del embrollo en que lo metió su incapacidad para controlar a su hijo, en el esquema de gestión actual. Deben reconocer que se equivocaron, que fallaron, que se corrompieron, que les ganó la ambición, sería su fin.
En consecuencia, se debe romper el esquema, y veo sólo dos opciones:
1. Que aproveche el 10 de abril para renunciar, bajo cualquier pretexto.
2. Que ya se anime, como seguramente le han sugerido los puñales que lo asesoran, a dar un autogolpe de estado.
La segunda opción es de altísimo riesgo; podría revertírsele, y quedar completamente borrada la 4T; que arribemos a un gobierno autoritario de derecha, quizá militar; los chairos serían perseguidos y AMLO podría correr una suerte similar a la de Muamar Gadafi.
Lo más probable es que sigamos como vamos, en un festín de más de dos años, en que traerán a AMLO como piñata, que a fuerza de garrotazos poco a poco vaya soltando dulces. Por supuesto que esos dulces serán recogidos por Carlos Loret de Mola, Brozo, Aristegui, y todos los que han adquirido relevancia confrontando a AMLO, con la capacidad de monetizar el festín.
Libertad, igualdad, fraternidad y racionalidad.