The Lancet corrobora que la mayor comorbilidad del COVID19 en México, es la pobreza.

 

El 1 de marzo de este año, concluimos nuestro dixit del modo siguiente:

 

“Debo decir que espero que Hugo López-Gatell se recupere a cabalidad del COVID19 que está sufriendo. Es una experiencia difícil de procesar: llegar a la conclusión de que la mayor comorbilidad es la pobreza, y que muchos de quienes se salvan de esto, lo pueden hacer por gozar de una condición privilegiada. Queda una especie de cruda moral, que en su caso espero sea para un más inteligente y científico abordaje del tema, alejado de la vulgar politiquería de tratar de complacer a AMLO en todas sus locuras, que no podemos llamar de otro modo a sus detentes y otras linduras como pretender que el virus ataca a los corruptos y respeta a los decentes.”

 

Por observación, por mi condición profesional que me permite asomarme a toda la gama social, desde los más ricos hasta los más pobres de este país, conociendo el modo en que se enfrenta la pandemia, determinada por su condición económica, llegué a la conclusión de que la mayor comorbilidad del COVID 19 en México, es la pobreza.

 

Hoy la revista mundial más prestigiada en el tema de la pandemia, The Lancet, corrobora lo que aquí anticipamos: los pobres tienen una probabilidad cinco veces mayor de morir, que los ricos.

 

La mayor causa de nuestras muertes ha sido por la falta de vacunas a tiempo. Y paradójicamente no fue porque los ricos las acapararan, sino por el hecho de que AMLO las acaparó, al ver en la pandemia una forma de lograr agradecimiento de los pobres al recibirla (le cayó como anillo al dedo), aunque ello significara que muchos pobres tuvieran que morir, pues los detestables ricos, que no podían adquirir de manera directa las vacunas, le propusieron al gobierno federal que les vendieran vacunas para proteger a sus trabajadores y sus familias, dando oportunidad, de ese modo, para que el gobierno comprara más vacunas y se concentrara en los más pobres para lograr una mayor y más rápida cobertura, evitando miles de muertes.

 

¿Pero a quién chingados en la 4T le importan las vidas de esos pinches pobres?  Lo importante es complacer a AMLO, en su afán de afianzarse en el poder, y ahí la llevan, mendingando vacunas, dosificando el agradecimiento de esos pobres, víctimas jodidas que caminan algunas hacia la muerte, y otras afianzándose más en la pobreza, ahora acompañados de 6.3 millones de pobres más, que antes de AMLO eran de clase media; pero ahí van, con su algarabía, con mariachis, emocionados hasta las lágrimas, diciendo: “es un honor estar con Obrador”.