La Muchacha, Volumen 1.
Con este dixit concluye el primer volumen de mi libro: La Muchacha, conformado por los 178 dixits que he publicado desde hace algunos meses hasta el día de hoy.
La Muchacha es la opinión pública de los mexicanos. En realidad deberíamos decir las muchachas: la nacional, las estatales, las municipales, las distritales, etc.
Los historiadores se pasan las horas en los archivos para obtener datos, muchas veces falsos, que les permiten forjar narrativas, más o menos lógicas, del acontecer nacional, centrando la atención en los actores políticos, tales como los presidentes, los generales, etc.
Estos dixits también tienen que ver con el actuar de los actores políticos, pero no rescatando de los archivos el pasado, con el grave riesgo de que la información sea falsa, sino narrando sus acciones a tiempo presente, con mucho menor riesgo de falsedades.
Recuerdo a un querido y longevo revolucionario, de los que anduvieron en la bola, burlarse de Enrique Krauze al verlo en la televisión haciendo afirmaciones sobre un hecho histórico, diciendo: “eso que dice Krauze es totalmente falso, yo estuve ahí”.
Otro rasgo distintivo de estas crónicas, es que los actores políticos no son tan importantes como en las históricas. Aquí el personaje central, el más importante es: La Muchacha.
Pues bien, ha concluido exitosamente la elección intermedia del 2021. Un gran éxito del INE y del Tribunal Electoral, pero sobre todo del INE y Lorenzo Cordova, quien tuvo que jugar a la política para lidiar al miura presidencial que amenazaba con exterminar al INE, para usar la expresión de Mario Delgado.
AMLO violó la ley electoral y la Constitución en múltiples ocasiones, quizá con la intención de reventar el proceso y pavimentar el camino para la exterminación del INE.
Lo lidiaron muy bien, le cedieron terreno, le dieron por chicuelinas y al final Lorenzo Garza (perdón, Córdova), coronó su faena con tremendo estoconazo (tocó pelo) el día 6 de junio, con una elección impecable, con leves incidentes, que dadas las restricciones presupuestales y la pandemia, fueron nimias. Los tendidos se pintaron de blanco por los pañuelos exigiendo trofeos para el matador.
La Muchacha se manifestó en las urnas, les bajó a los Morenos de 30 millones a 16 millones de apoyadores, y ni con chochos alcanzan la mayoría calificada que les permitiría exterminar al INE. ¡Los votos nacionales se han cubierto de gloria!
Orejas y rabo vitacilinizado para el gran Lorenzo, que tuvo que bajar de su módulo de juez de plaza para lidiar al miura presidencial, por razones de emergencia nacional.
Termina este volumen de La Muchacha, e inicia el siguiente justo en el arranque de la sucesión presidencial.
La Muchacha ya nos había avisado que andaba muy encabronada en el altiplano, y su enojo se ha traducido en los resultados electorales. A partir del próximo dixit, nos concentraremos en estar atentos a sus volátiles pareceres respecto a quien deberá ser, nuestro próximo presidente.
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