¡Ganamos la campaña! Perdimos la elección.

 

Quienes hemos tenido la experiencia de dar clases, quizá alguna vez hayamos tenido la experiencia de dejar a los alumnos en libertad de auto evaluarse. Ocurre un milagro: ¡Se abate el índice de reprobación! Dicho de otro modo, solo los más honestos o pendejos se auto reprueban.

 

Pues bien, belive it or not, en estos tiempos de campañas políticas, los candidatos contratan a estrategas que se auto evalúan, haciendo ellos mismos, o teniendo bajo su control, a quienes hacen las encuestas para ver cómo va la correlación de fuerzas. Esto es, para ver cómo han resultado las cosas como consecuencia de sus decisiones de campaña. Por lo común les va con madre; el candidato feliz se ilusiona con su inevitable triunfo, y paga gustoso por los servicios recibidos. ¡Todos ganan durante la campaña!

 

Ya cuando llega la elección habrá mil razones para explicar la derrota, pero muchas veces se alcanza el triunfo. Es finalmente una apuesta muy conveniente para los estrategas, porque si ganan, ganan. Y si pierden, el que paga es el iluso candidato que les confió la auto evaluación.

 

Por supuesto que un candidato sensato le impondría a sus estrategas un evaluador (encuestador) independiente, con relación directa con el candidato. Y si les impone a un Cartógrafo Político sería aún mejor, porque sería un reto para los estrategas explicar las alertas, en especial las negativas, para trazar alternativas, atendiendo también los aspectos tácticos.  Sería lo más conveniente para todos; para los candidatos por supuesto, pero para los estrategas también porque crecerían profesionalmente.

 

Es claro sin embargo que no les gusta ser evaluados por un encuestador profesional no dependiente de ellos. En cada campaña trato de convencer a mis clientes de este esquema. Por lo común me toca jugar el rol de la muñeca fea de Cri-Cri, escondido por los rincones. Los estrategas deberían aceptar el reto de ser evaluados por un tercero: ¡les va a doler, pero les va a gustar!

 

saba@sabaconsultores.com