Previamente el Gobernador presentó ocho alertas negativas consecutivas en el indicador relativo a un escenario hipotético donde se repitieran las elecciones con los mismos candidatos. El deterioro ha cesado después de continuos movimientos negativos, posiblemente por la percepción de que los diputados obstaculizan el trabajo al Gobernador, y el peso que todavía tienen los enemigos públicos, como el ex Gobernador Rodrigo Medina y la ex Alcaldesa Margarita Arellanes.

“Los diputados no dejan trabajar a Jaime Rodríguez” es el suceso más presente en la opinión pública. Después de varias semanas de conflicto magisterial, el tema de los maestros ya ha perdido relevancia en la opinión pública, como se observa en la Encuesta SABA.

El desplazamiento del tema magisterial sugiere que este fue el factor que le ocasionó adversidad al Gobernador, ya que, por el momento, este escenario parece revertirse con una advertencia positiva en su desaprobación, sugiriendo que algunos sectores han suavizado su postura en torno al Gobierno, para comenzar a verlo con mejores ojos.
Previamente, el tema de la denuncia contra Rodrigo Medina y el juicio a Margarita Arellanes habían generado frutos positivos en la percepción del Gobierno. Estos factores parecen alimentar nuevamente los resultados presentados, aunque, a juzgar por la dinámica anterior, sólo se podrán sostener si se procede de manera contundente contra ellos, pues hasta este momento no ha trascendido el impacto mediático, el cual ha sido positivo mientras el tema dure en la discusión pública, pero no a un mediano o largo plazo ya que otros sucesos importantes para las familias vuelven a cobrar relevancia.
Se sugiere este contexto al observar que Rodrigo Medina obtiene una alerta negativa en “peor político”, impulsada por diversos grupos como: San Pedro, Santa Catarina, casados, más de 15 años de estudios, ejecutivos y obreros; es decir, sectores de todo el espectro socio-económico. Entre más rechazo a Medina, más visto bueno al Bronco; así sugiere esta dinámica.
Este escenario no sólo reduce la desaprobación del Gobernador, sino la percepción de diversos problemas prioritarios, a diferencia de evaluaciones pasadas donde el desempleo, la delincuencia o la inseguridad presentaron deterioros y números rojos.
Es interesante observar cómo la “sed de justicia” de la sociedad parece neutralizar cualquier otro problema que afecte por el momento. A pesar de que hay sectores golpeados económicamente, como sugiere el indicador de percepción económica donde “a quienes apenas les alcanza” presentan un incremento, el Gobernador no recibe ningún impacto por este asunto, sugiriendo que mientras el tema público sea la justicia a Medina, cualquier deficiencia gubernamental es perdonada.