El pasado 20 de mayo, en el periódico El País, Jorge Zepeda Patterson publicó un artículo muy interesante, porque muestra la decepción,desde la izquierda, que está generando AMLO.

 

El referido artículo fue titulado del modo siguiente: ¿López Obrador en el punto de no retorno? Pues bien, desde mi punto de vista este golpe de lucidez de Jorge Zepeda es importante, porque abre la posibilidad de una oposición a AMLO desde la izquierda, que evite que México quede vacunado contra las ideas progresistas que la izquierda representa, al asociar a esta noble visión de la política con los desatinos cada vez mayores de AMLO.

 

Me he permitido hacer una selección de los argumentos de Jorge Zepeda, agregando unos comentarios míos, pero antes les comento que la fuente de todas las confusiones de nuestra intelectualidad, es que no entienden que la elección del 2018 fue paradójica. El pueblo bueno y sabio votó por un proyecto que no deseaba. Y tampoco entienden que aunque AMLO sigue teniendo apoyo mayoritario, su composición de fuerzas es ahora radicalmente diferente. El apoyo que muestra está muy inflado por el bono de la miseria. *

 

Los dejo con sus textos y mis comentarios:

JZP: Supongo que hubieron muchas señales, pero a mí me produjo una opresión angustiante en el pecho observar a un Andrés Manuel sonriente y feliz, dejándose rodear por niños de primaria que cantaban un himno plagado de loas a su persona.

SABA: Sí, hubo muchas señales desde el 2006. Perdió la elección por sus errores, y la izquierda debió reclamarle fuerte por ello, pero optó por la indulgencia.

JZP: No ayuda en nada que él esté convencido de que sus frases van para el bronce y que sus textos son un regalo iluminado para la humanidad; en suma, cuando se convence de estar investido de una supuesta infalibilidad, trátese de economía, historia, ecología, política, filosofía o humanismo. La humildad convertida en motivo de presunción.

SABA: No hay nada más atrevido que la ignorancia.

JZP: Pero deseo no es lo mismo que realidad por el simple hecho de que él viva en Palacio.

SABA: AMLO llegó al poder con la fantasía de que el poder es mágico. Ahora gobierna como aprendiz de brujo.

JZP: No quisiera perder la esperanza.

SABA: Cómo me dan pena las abandonadas, que amaron creyendo ser también amadas.

JZP: Para desgracia de muchos que votamos por Andrés Manuel y seguimos creyendo en sus banderas, ese discurso inaugural se fue debilitando con los meses. La borrachera del poder quiso otra cosa. Me hizo añorar los cuentos de hadas que tras el beso de consumación suelen terminar con el “vivieron felices”.

SABA: Lo dicho, estos se enamoraron perdidamente de AMLO.
Decía Alfonso Esparza Oteo, que el amor es un ave pasajera, que se anida y entorpece el pensamiento.

JZP: Lo que no entiende el presidente es que nada asegura nada, y que sus pares en la historia podrían terminar siendo Luis Echeverría y José López Portillo, y no Benito Juárez o Francisco I. Madero, como él cree.

SABA: AMLO es el único personaje que desde el inicio de su gesta, se arrogó la condición de héroe.

JZP: ¿Es recuperable el estadista que lleva dentro sin que nos endilgue una supuesta superioridad moral? Y si el mejor AMLO no regresa ¿vale la pena seguir apoyándolo a pesar de sus deslices en aras de la bondad de sus banderas?

SABA: AMLO no lleva ningún estadista dentro; es el amor el que te hace ver esas cosas compañero Zepeda.
Vale la pena apoyarlo para que no lo derrumben, porque las consecuencias de ello serían terribles. Debemos acompañarlo y protegerlo hasta el final de su sexenio, creando condiciones dentro o fuera de Morena, que nos permitan arreglar el desastre de país que va a dejar.

 

*El bono de la miseria es el voto de los más pobres. Ellos, por su condición de inopia, casi siempre aprueban a las figuras de poder. Sean del partido que sean.