La proyección electoral de SABA en el ‘monitoreo vulgar’ o tracking desde el 29 de enero al 20 de mayo nos da una idea muy precisa sobre la evolución que ha tenido el enfrentamiento entre las diferentes fuerzas en busca de la gubernatura de Nuevo León. Decimos esto porque a partir de mediados de abril el BONL (Bloque Opositor de Nuevo León) -integrado por las cámaras empresariales, el PAN, las ONG de derecha y el diario El Norte, que es su artillero- lanzaron la ofensiva contra el gobernador Medina y su familia con el escándalo de los terrenos en Mina, Nuevo León. Desde ahí empezó el ascenso de Jaime Rodríguez “El Bronco” y de Fernando Elizondo, mientras Felipe de Jesús Cantú logró algunos avances pero sin salirse de un cierto promedio o nivel. Y todo lo contrario en el caso de Ivonne Álvarez, que caminó descendiendo y en sentido opuesto. A partir de que el ascenso del Bronco se detuvo a la altura del 11 de mayo -y que tendió a estabilizase junto a Felipe y Fernando Elizondo aunque este último en un nivel inferior-, Ivonne empezó a repuntar. Esto quiere decir que los escándalos sobre los terrenos de Mina a mediados de abril en adelante, el ataque contra El Bronco por parte de su ex esposa el 30 de abril, el uso de un avión en esos mismos días, el video del padre del gobernador el 17 de mayo y el escándalo del “shalala” contra Ivonne, tuvieron efectos ambiguos y no lineales. Cuando empezó el escándalo de los terrenos en Mina, El Bronco, Ivonne y Felipe cruzaron los niveles de 27% y 30% en proyección electoral. A partir de ahí empezó el ascenso del Bronco hasta el nivel de los 38%, pero también la caída de Ivonne quien pasó de ese rango de 27% o 28% a niveles de hasta un 21%. Felipe de Jesús también empezó un descenso desde ese rango de 27% o 28% hasta un 21%, pero luego repuntó para subir hasta un 28%. Esto quiere decir que el ataque del BONL hizo caer a Ivonne, favoreció al Bronco y no tanto a Felipe (como el BONL hubiera deseado). Cuando llegaron los escándalos del padre del gobernador y después el del “shalala” contra Ivonne, El Bronco dejó de beneficiarse y empezó a caer desde los altos 38% gracias a las acusaciones de su ex esposa sobre “violencia intrafamiliar” -o que le puso una “madriza”, que es el término científico adecuado- para estabilizarse en el rango de 31% o 32%. Felipe también se estabilizó en el rango de 27% y 28% y fue alcanzado por Ivonne que todos esos días fue descendiendo desde el nivel 22% en el que cayó desde que los escándalos anti corrupción contra el gobernador Medina fueron más intensos. Por supuesto, en este periodo Ivonne se deslindó del gobernador y de su padre, respondió frontalmente al escándalo del “shalala” y, evidentemente, el equipo de campaña y su maquinaria electoral asistencial se pusieron las pilas. Claro, El Bronco también hizo lo suyo y logró atraer en alianza a Fernando Elizondo, mismo que aunque ascendió de un modesto 12% a un 15% en este periodo de escándalos y ataques, no logró pasar de ahí, cosa que reconoció públicamente al formalizar su alianza con El Bronco.