De acuerdo a los resultados de las mediciones de Saba Consultores hasta el día 2 de septiembre del 2014, y tal y como lo indican las mediciones que se han hecho a lo largo de los últimos meses, la clase política del estado debe poder revertir la indiferencia que sienten hacia ellos el grueso de la población: Un 74.4% de los entrevistados no siente predilección por ninguna figura para que sea gobernador del estado y, además; hasta un 64.6% de los entrevistados no se identifica con ningún partido político.
Como las mediciones de Saba son un “muestreo”; es decir, como los que se hacen en diferentes puntos del Río San Juan para saber si sigue contaminado todo el río; así los entrevistados reflejan el pensar general.
Dentro de la población que sí influyen los partidos y las figuras políticas, la operación para placear y “posicionar” a Ildefonso Guajardo como aspirante a la gubernatura — la que incluye entrevistas de TV,
comentarios en columnas de “grillólogos”; editoriales de los veteranos de la pluma en el estado, el evento de la empresa coreana etc.,–, dio como resultado que el secretario de Economía aumentara su conocencia entre ese segmento estrecho de la población hasta un sorprendente 37.1%.
Sin embargo y quizá por haber promovido tanto su imagen, Ildefonso sale del Top of Mind o intención espontánea de voto, donde obtiene 0.0%, lo cual quiere decir que quizá su lenguaje muy “elevado” o técnico y su escaso carisma dieron como resultado que, al conocérsele más, la intención de voto a su favor se evaporara.
Esto es algo que sucede con muchos políticos y especialmente con Margarita Arellanes, la “líder” en la conocencia que, sin embargo, entre quienes la conocen la intención de voto baja hasta los 30 y tantos puntos. A Mauricio Fernández le ocurre algo similar pero, claro, no tan drástico como ocurrió con Ildefonso. Sus asesores de imagen tendrán que quebrarse la cabeza. El rubro de la conocencia donde, decíamos, reina Margarita Arellanes con un 90.1% es, sin duda, el rubro que más interesa a los políticos y aspirantes en este momento, y no necesariamente lleva implícita la simpatía.
La conocencia se gana en base a spots de radio y TV; entrevistas “espontáneas” en los noticieros de TV; repartir y regalar despensas y otros artículos de consumo; asistencialismo social electoral, eventos públicos con una buena dosis del “efecto chavana” etc. Ese es el caso, sin duda, de lo logrado en ese rubro por la mencionada alcaldesa, por Ivonne Álvarez, por Marcela Guerra que reapareció en el Top of Mind etc. Sin embargo, otros como Fernando Elizondo o Mauricio Fernández no requieren de esas “técnicas” de ingeniería social y utilizan solo a los medios para apariciones ocasionales que los mantienen en la mente de la gente, dentro de ese 26% de la población que se identifica con los partidos y sus figuras.