Los medios y sus intelectuales, han perdido su capacidad de influencia.

 

El los 40’s se consideraba a los periodistas como orientadores de la opinión pública. Hoy, el cuarto poder ha dejado de poder (Recuerdo a aquel viejo periodista que desdeñaba el cuarto poder, afirmando que el solo ambicionaba poder en el cuarto).

 

Si nos atenemos a lo que se escribe y dice en los medios masivos de comunicación, AMLO, como afirman GEA-ISA y otros aficionados, tendría algo así como 45% de aprobación, pero sigue navegando tranquilo con su 60% de aprobación.

 

Lo anterior significa que los periodistas de opinión, intelectuales y académicos ya no influyen en la opinión pública, si es que alguna vez influyeron. Lo interesante es que sus artículos destrozan una y otra vez los argumentos o criterios que fincan las decisiones presidenciales, pero nadie, al menos no lo he visto, se cuestiona por qué han perdido tanta efectividad.

 

Dicho de otro modo, por qué los mexicanos mantienen su apoyo a AMLO, a pesar de todas las barbaridades que la intelectualidad le ha acreditado. Por otra parte, muchos de esos intelectuales apoyaron, como colegialas enamoradas, a AMLO. Nos deben una explicación a su desliz intelectual y político.

 

¡Ah! ¡Y una disculpa por seguir creyendo en las encuestas!