El Norte, protagonista electoral.
Hace seis años, en la elección para gobernador en Nuevo León, tuvimos un prolongado triple empate técnico entre Ivonne Álvarez, Felipe de Jesús Cantú y Jaime Rodríguez.
Un factor determinante para romper aquel empate, fueron las denuncias de corrupción contra el gobernador Rodrigo Medina y su padre, publicadas en El Norte. Así es en efecto, El Norte fue un factor para la decisión, con el poder de su influencia, que es el valor más preciado para un medio de comunicación; de la influencia se deriva todo: lectores, suscriptores, anunciantes, poder.
Hoy, seis años después, lo intenta de nuevo. No sabemos aún si lo va a conseguir; las circunstancias son distintas, a saber: Ayer se presentó una rebelión de candidatos, que decidieron no asistir al debate convocado por El Norte. Larrazabal afirmó que más que debate era una emboscada, Clara Luz que no había condiciones para una evaluación justa a su desempeño, y Adrián que El Norte había dejado de ser un medio imparcial.
Creo que Larrazabal y Clara Luz tienen razón. Sí era una emboscada, y claramente los juzgadores eran un grupo sesgado ideológicamente hacia la derecha. Con Adrián discrepo, El Norte nunca ha sido imparcial, siempre ha sido parcial; más aún, nada de malo tiene en ser parcial, las ideologías, los valores, las creencias, de manera natural crean parcialidades.
El problema de El Norte no es haber perdido la imparcialidad; ¡es haber perdido la vergüenza!, evidenciado esto con el uso ruin que han hecho de las encuestas para engañar a los electores, para llevarlos engañados a las urnas, atentando contra el espíritu democrático.
Llegamos pues a la recta final, con una fuerte asociación entre El Norte y Samuel García. Si gana Samuel también ganará El Norte, confirmará su influencia para poner gobernadores, como acusa AMLO.
Si pierde Samuel también perderá El Norte, indicará que ya no influye, que habrá iniciado, o se habrá acelerado, su declive.
Por lo pronto veremos, a través de las encuestas, cuál fue el saldo del zipizape de ayer. Si se fortalece Samuel será un round ganado por El Norte, si se debilita, habrán perdido los dos este round.
Por lo anterior, la próxima encuesta electoral de El Norte será también una auto evaluación de su capacidad de influencia. Dicho de otro modo, muy probablemente en la próxima encuesta de El Norte, Samuel tendrá una ventaja ridículamente enorme.
¡Hasta la próxima!
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