-La clase política de Nuevo León sigue sin conmover a una mayoría indiferente.
-Jaime rodríguez “El Bronco” usa el método de Vicente Fox: Aprovechar la desinformación e ignorancia de la gente para posicionarse.
La indiferencia, desconfianza o el desprecio –así, en orden descendente– de una ciudadanía mayormente desinformada es el principal desafío para la clase política de Nuevo León y al mismo tiempo es la base objetiva para el ascenso de Jaime Rodríguez en las encuestas de Saba Consultores, esto debido a una campaña que hace uso del “método de Vicente Fox”: disfrazarse de “disidente” para atraer a sectores que desconfían o desprecian a la clase política, aprovechando la desinformación (y muchas veces la ignorancia) de esa ciudadanía.
El día 12 de febrero un 73.2% de los entrevistados por Saba Consultores dijo no sentirse identificado con ningún partido político. Un 53.5% dijo que si tuviera que votar hoy, no lo haría por ninguno de los partidos existentes, que está indeciso o no respondió; la experiencia sugiere que estos grupos terminan en la abstención. Y en el periodo medido un 59.4% dijo no tener claramente como favorita (Top of Mind) a ninguna de las figuras que aspiran a la gubernatura.
En medio de todo esto El Bronco asciende desde los niveles del 2.5% de preferencia electoral intensa (Top of Mind) que tenía a principios de enero, hasta el 15.6% logrado el 9 de febrero; ascendió a las regiones del 10% en varias mediciones para volver a subir al 12% en donde se mantiene hasta esta última medición. Este ascenso ubica a Jaime Rodríguez en empate técnico con Ivonne Álvarez, quien obtuvo un 14.0% y que ya no ha podido regresar a la región de los 20% que logró el 15 de enero después de su “destape”.
Jaime Rodríguez utiliza, decíamos, el método de Vicente Fox, un político propiedad de la derecha y de los bancos españoles, que se camuflajeaba de “ranchero” y utilizaba un lenguaje simplón dirigido al nivel intelectual más bajo de “la raza” para ocultar sus verdaderas intenciones.
Podemos suponer que detrás de Jaime existe un grupo político ligado al PRI –nada disidente del sistema sino parte de él– que le está disputando la hegemonía política en el Estado al grupo del gobernador Rodrigo Medina y a su ex aliado Natividad González Parás.