-ESCÁNDALOS DE CORRUPCIÓN, INSEGURIDAD, LLUVIAS Y SUS EFECTOS, GOLPEAN A LA CLASE POLÍTICA Y AL GOBERNADOR.
-EL FACTOR ECONÓMICO APARECE COMO CAUSAL DE LA ANOMIA SOCIAL.

Los números obtenidos por SABA Consultores en sus mediciones hasta el 5 de noviembre están determinados, en gran medida, por los escándalos de corrupción, como el de Ricardo Anaya del PAN o el de Javier Duarte –el priista prófugo–, y el impacto de las fuertes lluvias, las inundaciones y sus estragos, los cuales exhiben a la clase política como incapaz y exacerban el descontento; sin embargo, los alcaldes de algunos municipios se salvan de esta situación quizá por haber estado activos y presentes en el momento de los sucesos.
Los escándalos de corrupción pueden explicar que tanto el PAN como el PRI obtengan advertencia negativa en el rubro de identificación partidista con un 8.9% y un 5.4%, respectivamente.

Igualmente, estos escándalos –profusamente difundidos por los medios de comunicación– aumentan la desmoralización general o anomia y el porcentaje de quienes no se sienten identificados con ninguna opción política, que aumenta a un 79.1% viniendo de un promedio de 67.2% en las últimas mediciones.
En este ambiente, el caso de Rodrigo Medina vuelve a la mente de los entrevistados por SABA, quien obtiene un 30.8% en el rubro de “peor político” o villano favorito.

Por otro lado, la inseguridad, las lluvias y sus desastres provocan que un 21.1% de los entrevistados mencione algún evento relacionado a asesinatos, secuestros y robos como lo más presente en su mente. Por ello, el Gobernador es castigado y obtiene un 5.4 de calificación en seguridad pública, después de tres mediciones con un 5.5, lo cual le indica una advertencia negativa.

El cuadro general que presenta el Estado, agravado por las lluvias y algunos desplantes personales o declaraciones desafortunadas de El Bronco, hacen que el Gobernador también se vea afectado en otros rubros; por ejemplo en “mejor político”, donde cae de un promedio de 4.8% a sólo un 0.5% el día 5 de noviembre. Además, en el rubro de “si de nuevo hubiera elecciones votaría por él” cae a un 21.3% después de tres mediciones en niveles de 28%, 24% y 22%. Por otro lado, el factor económico como causal de la anomia social también aparece dentro de los números obtenidos por SABA.

Un muy alto 77.9% de los entrevistados menciona tener algún tipo de dificultad económica el día 5 de noviembre, porcentaje muy significativo para un Estado como Nuevo León, que tiene uno de los niveles de vida más altos de la República. Además, la preocupación por el desempleo, aunque se mantiene en niveles por debajo de un dígito, sigue en ascenso.