Rodrigo Medina, a la cabeza del Top of Mind – Nuevo revés para la Fiscalía Los nuevoleoneses no quieren al Bronco presidente Los datos de la medición de SABA Consultores del pasado 13 de agosto nos indican que la corrupción es el principal problema para el 18 % de los encuestados, lo cual supone alerta negativa y valor récord.

Al mismo tiempo, en el “Top of mind”, Rodrigo Medina figura a la cabeza con un 17,8 %, por encima ya de los maestros e incluso de la inseguridad (aunque ésta siga siendo el principal problema de fondo para la mayoría de los encuestados). En la mente de los nuevoleoneses estuvieron también la detención del Z (2,4 %) y, cómo no, los Juegos Olímpicos, con un 2,3 %. Visto que hasta un 71,8 % se declara nada satisfecho con su situación económica, y un 32,3 % tiene ingresos mensuales inferiores a 2.400, lo cual es alerta negativa por quinta vez consecutiva, no es raro que la gente, a falta de pan, se refugie en el circo.

Nada nuevo bajo el sol.Y en circo se podría convertir el que, como hemos visto, es el acontecimiento central de los pasados días: el proceso a Rodrigo Medina. El otro día el exgobernador se libró (de momento) de los cargos sobre peculado y daño al erario, es decir, precisamente aquéllos que implican devolución del daño económico causado.

Podrán decir que algo es algo, pero está claro que ahora las malas caras son las de Canales y Fasci, y por supuesto, la del Bronco, aunque intente disimularlo con el curioso trabalenguas de que “nunca prometió que Medina fuera a la cárcel, sino que los corruptos pagarían sus delitos”.

Da la impresión de ser un paso atrás en sus planteamientos, o una venda antes de recibir la pedrada. En todo caso, una muestra de inseguridad. Por mucho que diga, la bandera de su campaña fue la lucha contra la corrupción, y la corrupción en Nuevo León (con todas las reservas y el respeto debido a las futuras decisiones judiciales), tiene un nombre, y sobre todo un apellido: Medina. Malo el cuento si el Bronco ya anda sacando a Rodrigo del saco de los corruptos, no debe tener buenos presentimientos. Sabemos ya que el Juez de Distrito rechazó el amparo de Medina, con lo que éste pierde la protección federal contra posibles medidas cautelares.

En breve sabremos si la Fiscalía recurre la exoneración sobre los cargos antes mencionados, ahí podremos ir viendo la medida en la cual Jaime Rodríguez y su equipo están dispuestos a dar la batalla, porque hay quien dice hasta que el Bronco negoció con Peña una salida airosa a la situación del exgobernador, así que cualquier bajada de guardia se vería muy, muy fea.

La gente va a empezar a pensar que todo fue pura faramalla si la Fiscalía no se apunta un tanto claro, y pronto.La gestión de Jaime Rodríguez y su equipo está claramente a los ojos de la opinión pública en un compás de espera, y no se espera a otra cosa que al rumbo que adopte el proceso de Rodrigo Medina.

Ahí puso el Bronco, como decíamos días pasados, los reflectores, y ahora le va a costar mucho desviarlos. Sobre todo porque no se observan logros relevantes en su ejercicio de gobierno, baste decir que el mayor reconocimiento es el transporte público gratuito para los estudiantes, con algo más de un 4 %, un asunto loable, pero sin duda menor. Y también teniendo en cuenta los graves problemas de inseguridad que persisten sin dar signos de mejoría y las últimas ocurrencias del Gobernador sobre, por ejemplo, las automotrices.

Y para colmo, por mucho que haya cierto movimiento de carácter un tanto mesiánico que clama en las redes y en algunos artículos de opinión por la aparición de un paladín que acabe con la partidocracia en México, la opinión de Nuevo León está claramente en contra de que Jaime Rodríguez opte a la Presidencia. Sólo un 28,7 % estaría de acuerdo frente a un 58 que no.

El Bronco todavía no tiene credenciales para emprender tal cosa.Los nuevoleoneses andan mal económicamente, y parece que cada vez peor. Quieren que los corruptos paguen sus culpas, y no parece que no vean entre ellos a Rodrigo Medina.

Quieren, y así lo afirman, que el Gobernador que eligieron hace poco más de un año termine su labor, que apenas ha empezado, y cumpla sus promesas.

Pienso sinceramente que Jaime Rodríguez debe dejar de escuchar cantos de sirena y centrarse en la labor que Nuevo León le ha encomendado. Porque además de todo lo anterior, quieren, y mucho, que el gobierno alivie su situación económica. No vale decir que algo es algo. Si no hay pan, no se puede dar de comer a la gente con tan sólo circo.