VALORACIÓN NACIONAL SUSCRIPTORES AL 9 DE OCTUBRE
- No mucho, pero algo cambió el panorama en diez días. Y la mayoría de los cambios indican que hubo un deterioro para AMLO, aún leve en términos de aprobación, pero manifiesto en la mayoría de los otros indicadores que se refieren a él y a su partido.
- La caída en el rubro de aprobación es, como digo, leve, y tan sólo roza la advertencia negativa. Sin embargo, hay una alerta del mismo signo en su calificación media que es muy significativa, sobre todo en cuanto a su origen.
- El descenso en la calificación del Presidente se debe tanto a un aumento de las calificaciones bajas como a un descenso de las altas. Y este último es muy elocuente en tanto que ilustra que un componente importante de este desgaste proviene de sus propias bases.
- Aunque los militantes de Morena, que son como sabemos muy numerosos, figuren en los antihipocentros de estos avisos, eso tan sólo quiere decir que fueron quienes menos participaron de ello, pero no los exonera de participar, como veremos a continuación. De hecho, son los principales protagonistas.
- Los descensos se han producido en al menos tres indicadores referentes a los seguidores de Andrés Manuel: el mencionado de calificaciones altas, la identificación partidista con Morena y la consideración como mejor político, tres rubros en los que figuran sendas advertencias desfavorables.
- A ello hay que añadir una baja en la intención de voto para Morena. A la vista de ello, y de continuar esta situación, tanto las perspectivas electorales del partido de AMLO como la propia aprobación del Presidente pueden recibir más perjuicio en las próximas semanas si no subsana la situación quienquiera que tenga la misión de hacerlo.
- Hay, además, un grupo, el de los más jóvenes, que participa activamente en ese desgaste, junto al de los usuarios de internet. Son también los más jóvenes quienes favorecen la segunda advertencia positiva para el PAN en intención de voto.
- Visto lo anterior, asistimos a un curioso contrasentido: puede que ciertas actitudes de AMLO estén despertando una natural actitud contestataria entre los de menos edad que sólo halla cauce en el populismo opositor, que ahora representan los acampados en el Zócalo. En cualquier caso, un fruto más de una nada deseable polarización.
- Ante esta realidad, cabe preguntarse qué se ha indigestado en el camino de Andrés Manuel y su partido en los últimos días para interrumpir una muy estable marcha de ambos en aceptación, aprobación e intención de voto.
- Lo que más presencia en medios en la última semana ha sido, al margen del plantón, parte de cuyos efectos podrían ser los reseñados, el proceso interno de Morena, los bonos de Pemex, y la fuerte polémica alrededor de los fideicomisos.
- El “Top of mind” nos revela que, por más que Porfirio patalee contra el empate y denuncie conspiraciones en la elección de Morena, los ciudadanos en general no han centrado en ello su atención. Pero sí en los bonos de Pemex y también ostensiblemente en los fideicomisos. Por ahí puede andar la explicación.
- Queda claro que, de un modo u otro, el Covid19 ha pasado a segundo plano en la atención de los mexicanos, lo que explica también la alerta positiva de ese concepto como principal problema, que pone colofón a una serie por debajo de la media.
- Las cortinas de humo de López Obrador parecen inagotables. Tras la rifa, viajamos ahora hasta 1521, para que España se disculpe, y con una primera dama que acudió tocada y enlutada a solicitar lo mismo al Papa. Aparte viajes en el tiempo e inútiles ejercicios de memoria parcial e interesada, que censuró hasta el EZLN, insisto una semana más: ¿se acuerda alguien de Lozoya, que es bastante más reciente? En ese aspecto, la amnesia fue repentina: los videos del hermanísimo fueron mano de santo.